Abraham Solomon Iré herido por el trigo al pisar el campo cuando la tarde azul cante en verano. Soñador, sentiré s...
domingo, 27 de noviembre de 2016
La luna, de Jorge L. Borges
A María Kodama Hay tanta soledad en ese oro. La luna de las noches no es la luna que vio el primer Adán. Los largos siglos de la vigilia humana la han colmado de antiguo llanto. Mírala. Es tu espejo. Jorge L. Borges